El Gobierno británico anunció que llevar mascarilla y respetar el distanciamiento físico dejará de ser obligatorio en dos semanas, mientras Chile levantará la cuarentena en su capital a partir del jueves y Uruguay habilitó los eventos sociales, a pesar del avance de la variante Delta y en momentos en que el mundo se apresta a superar los cuatro millones de muertes por la enfermedad.